Dieciocho años después de la tragedia ocurrida en la mina Pasta de Conchos de Sabinas, Coahuila, los restos de, José Alfredo Ordóñez, el primer minero identificado, fueron sepultados ayer lunes en el municipio de Nava, donde radican sus hijos.
José Alfredo, “El cuate”, tenía apenas 25 años cuando murió atrapado en el trágico accidente ocurrido el 19 de febrero de 2006 en la mina de Sabinas.
La señora María Luisa Martínez y sus hijos despidieron a José Alfredo, agradeciendo que luego de casi veinte años por fin pueden darle sepultura.
El accidente en la mina, propiedad de Grupo México, causó la muerte de 65 mineros y dejó heridos a once trabajadores.