La casa donde se filmó «La masacre de Texas», uno de las películas más representativas del cine de terror, está siendo habilitada para convertirse en un restaurante estilo sureño que rendirá homenaje a dicho filme de 1974.
La residencia tipo victoriana fue removida en 1998 de Round Rock, Texas lugar donde se llevaron a cabo las grabaciones para ser llevada a Kingsland y hasta hace poco era sede del Grand Central Café.
La película que se convirtió un clásico del terror es la historia de un grupo de jóvenes que viajan por carreteras de la zona rural de Texas donde se encuentran con una familia de caníbales que viven en una antigua granja y deben escapar de uno de ellos llamado Leatherface, que los persigue con sierra mecánica portando una máscara de piel humana.
La propiedad fue adquirida por Simon Madera, propietario de la franquicia Taco Flats con sede en Austin quien mencionó al periódico Dallas Morning News que su restaurante rendirá homenaje a la película.
En primera instancia, el nuevo dueño de la casa dijo que el restaurante se llamará Hooper’s, en honor al director de la película, Tobe Hoope, además hizo un llamado a los fanáticos de ese filme para que donen motosierras que se exhibirán en un sitio destinado para ello dentro del local.