Este lunes se cumplen dos semanas que el Puente Internacional Uno que une a Piedras Negras con Eagle Pass fue cerrado en plena época decembrina debido a que nuevamente se incrementó el cruce por el Río Bravo de miles de migrantes, sin que todavía haya una fecha prevista para su reapertura.
La caótica situación que enfrenta la población de esta frontera ha atraído la atención de personajes conocidos a nivel mundial, así como la de medios internacionales como el New York Times, que hoy presenta un reportaje sobre el cierre del Puente Internacional Uno.
El renombrado periódico hace énfasis que la determinación tomada por el Gobierno de Estados Unidos de cerrar los puentes internacionales de Eagle Pass y el de Arizona para hacer frente al procesamiento de miles de migrantes, está provocando que los residentes fronterizos paguen el costo de dicha decisión.
Y es que a raíz del cierre del Puente Uno el pasado 1 de diciembre, en esta frontera se están registrando kilómetricas filas de vehículos que deben esperar un lapso de hasta 3 horas para poder cruzar a Eagle Pass.
Lo anterior trajo consigo la drástica caída en las ventas del comercio de esta ciudad y de Eagle Pass, donde se reportan pérdidas hasta de 80 por ciento en plena época decembrina, los volúmenes de carga que cruzan diariamente a Texas también han registrado una disminución de hasta un 50 por ciento.
Sin embargo, las caravanas de migrantes, en su mayoría familias con niños, continúan llegando diariamente a Piedras Negras para cruzar el Río Bravo, tan solo la semana pasada, la Patrulla Fronteriza reportó un nuevo récord en el cruce de migrantes, al informar el ingreso a Texas de 17 mil .034 personas en 5 días, que significa más de la mitad de los habitantes de Eagle Pass.
El Mayor de Eagle Pass, Rolando Salinas calificó el tema como insostenible, pues impacta gravemente la economía y la vida diaria tanto de Eagle Pass, como de Piedras Negras.