Esta semana la Cámara de Diputados aprobó la reforma para la extinción del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), que será sustituido por IMSS-Bienestar, como organismo responsable de dar atención médica a las personas sin seguridad social.
Tras la controversia y confusión que ha provocado la desaparición del Insabi, el presidente López Obrador aclaró ayer que ahora formará parte de la Secretaría de Salud con el propósito de generar ahorros y evitar la duplicidad de funciones de los organismos.
“Vi lo del Insabi y es ¡qué barbaridad cómo van a desaparecer el Insabi, Ya desaparecieron el Seguro Popular!, como si hubiese sido la panacea o resuelto el problema de salud, cuando el Seguro Popular servía básicamente para permitir que se robaran el dinero dedicado a la salud en la compra de medicamentos”, dijo el presidente en la conferencia de este viernes.
Respecto al tema, el secretario de Salud en Coahuila, doctor Roberto Bernal reconoció que a pesar que hubo lentitud en los trámites ante el Insabi hubo cosas positivas, como la compra de 70 angiógrafos que están por llegar al estado.
«Cada angiógrafo cuesta alrededor de 70 millones de pesos, también hubo cosas buenas”, mencionó Bernal Gómez.
Agregó que el Insabi intentó hacerse cargo de los hospitales generales de Coahuila y no fue aceptado, aunque evitó opinar sobre el traspaso del Insabi al IMSS-Bienestar.
Ya son trece los estados del país incorporados al modelo de atención a la salud implementado por el gobierno federal llamado IMSS-Bienestar que tiene el propósito de brindar atención médica gratuita a las personas que no cuentan con seguridad social, programa del cual hasta ahora Coahuila no forma parte.