Luego que un video viralizado en redes sociales donde se observa que habitantes del Ejido Santa Cecilia, en Castaños, Coahuila, torturan hasta dar muerte a un pequeño ejemplar de oso negro que bajó hasta la zona habitada en busca de agua, Profepa dio a conocer en un comunicado que inició una denuncia penal contra quienes resulten responsables.
«En relación con los sucesos reportados en Coahuila sobre un ejemplar de vida silvestre, la @PROFEPA_Mx formula una denuncia penal en contra de quien o quiénes resulten responsables por los hechos que puedan ser constitutivos de delito contra la biodiversidad”, dice el comunicado.
Usuarios de redes sociales piden se haga justicia ante los lamentables hechos que ocurrieron frente a policías municipales de Castaños que reían al ver como el osezno era masacrado.
De acuerdo con la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y la Norma Oficial Mexicana 059, el oso negro es una especie catalogada como “en Peligro de Extinción”.
El gobernador de Coahuila, Miguel Riquelme, condenó la acción de los habitantes del Ejido Santa Cecilia a través de su cuenta de Twitter: » Reprobamos enérgicamente las indignantes acciones de quienes participaron en el maltrato y muerte de un ejemplar de oso negro en el municipio de Castaños, ya están a cargo de las investigaciones por la muerte de un especimen en peligro de extinción y el maltrato al que fue sometido. La Fiscalía General de Coahuila de acuerdo a sus facultades ya está investigando y actuará para castigar a los responsables de maltrato animal. Atentar contra un animal en peligro de extinción es atendido por la autoridad federal».
La masacre del osezno se da en el marco de una sentencia de más de 10 años dictada en Querétaro contra un hombre que dio muerte a dos perritos rescatistas de la Cruz Roja: Athos y Tango. Este es el primer juicio que llega a sentencia en el país y con el que buscan sentar precedentes en contra de los maltratadores de animales.